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ADMINISTRACION
Alicia, como todos los
sábados salía con sus amigos, iban a la discoteca, o al cine, en fin, se
divertían juntos y nunca ocurrió nada fuera de lo normal.
Como de costumbre Alicia se arreglaba mucho para salir, tocó el timbré y ya eran sus amigos que le esperaban en la puerta. Salió, a prisas, cogió su bolso, su móvil y su cigarrillo.
Ya en la discoteca, busco un asiento en el bar, y encendió un cigarrillo. Ella estaba muy sexy, llevaba una minifalda negra, y una blusa que mostraba buena parte de sus senos, pero como a ella siempre le gustaba la discreción, llevaba una chaqueta por encima, llevaba botas negras hasta la rodilla.
Después de haber encendido un cigarrillo, ella como en este momento estaba sin pareja para bailar, pidió una copa. Y se quedó ahí, mirando a la gente, pero su parada se detuvo cuando vio a una mujer, al otro lado de la discoteca. La mujer era muy guapa, pero Alicia intentó borrar lo que estaba pensando en el momento en que la miraba, la imaginaba en ropa interior.
No quiso aceptar lo que estaba pensando y salió al medio de la gente para encontrar alguien con quién bailar, y encontró, un chico muy guapo, se llamaba Carlos , y parecía ser el sueño de todas las chicas, tenía el cuerpo perfecto, una sonrisa… Empezaran a bailar de una manera sexy, cada vez estaban más cerca uno el otro, entonces Alicia vio que la mujer a la que le había llamado la atención, le estaba mirando fijamente, en la manera como bailaba, como se movía, y sus miradas se cruzaron, Alicia intentó disfrazar pero no pudo su mirada era como un imán, la mujer era inmensamente bella.
Pero Alicia siguió bailando con Carlos y mirando a la mujer que tanto le llamaba la atención por su belleza.
Al término de la música que bailaban, Alicia se dirigió al bar y bebió un sorbo de su bebida. Se sentó y en cuanto encendía un nuevo cigarrillo la mujer, si esta, se acercó a su oído por detrás, y pronunció, vagarosamente, con una voz muy sexy - ¿puedo sentarme a tu lado? - Alicia sin poder decir que no le dijo si. La mujer le preguntó su nombre, y Alicia respondió turbada. Y antes de que Alicia pudiera preguntar como se llamaba aquella belleza, la mujer dijo - yo soy Susana. Y así empezaron una conversación, que hizo Alicia perder la noción del tiempo. Sus amigos volvieron de la pista de baile y preguntaron si Alicia no quería bailar y dijo que no. Presentó a Susana a sus amigos, y estés le dijeron a Alicia que se iban a otra discoteca, y le preguntaron si ella quería venir, y apresuradamente miró a Susana, la cuál le miró fijamente en los ojos, lo cuál hizo a Alicia tener escalofríos. Dijo a sus amigos que no quería ir, y que no se preocupasen por ella, que para volver a casa iba a coger un taxi.
Volvió la mirada a Susana, la cual le miraba con deseo de poseerla. En el rato que estuvieron hablando Alicia se quedó sorprendida por la maravilla de mujer, no solo físicamente, que acababa de conocer. Y entonces Susana se acercó a su oído, y le dijo - voy al baño, quieres venir - Alicia ya sabiendo de sus intenciones, le cogió la mano a Susana y fueron al baño.
Ya en el baño, Alicia se encostó en la pared al cerrar la puerta. Susana le miraba con deseo. Se acercó, le tocó el rostro, su boca con la punta de su dedo indicador, lo bajó por el cuello, por sus senos y se detuvo ahí. Empezó a besarla, suavemente, mordiéndole los labios, tan delicadamente que el cuerpo de Alicia estremecía de deseo, solo en pensar lo que Susana era capaz de hacer.
Como de costumbre Alicia se arreglaba mucho para salir, tocó el timbré y ya eran sus amigos que le esperaban en la puerta. Salió, a prisas, cogió su bolso, su móvil y su cigarrillo.
Ya en la discoteca, busco un asiento en el bar, y encendió un cigarrillo. Ella estaba muy sexy, llevaba una minifalda negra, y una blusa que mostraba buena parte de sus senos, pero como a ella siempre le gustaba la discreción, llevaba una chaqueta por encima, llevaba botas negras hasta la rodilla.
Después de haber encendido un cigarrillo, ella como en este momento estaba sin pareja para bailar, pidió una copa. Y se quedó ahí, mirando a la gente, pero su parada se detuvo cuando vio a una mujer, al otro lado de la discoteca. La mujer era muy guapa, pero Alicia intentó borrar lo que estaba pensando en el momento en que la miraba, la imaginaba en ropa interior.
No quiso aceptar lo que estaba pensando y salió al medio de la gente para encontrar alguien con quién bailar, y encontró, un chico muy guapo, se llamaba Carlos , y parecía ser el sueño de todas las chicas, tenía el cuerpo perfecto, una sonrisa… Empezaran a bailar de una manera sexy, cada vez estaban más cerca uno el otro, entonces Alicia vio que la mujer a la que le había llamado la atención, le estaba mirando fijamente, en la manera como bailaba, como se movía, y sus miradas se cruzaron, Alicia intentó disfrazar pero no pudo su mirada era como un imán, la mujer era inmensamente bella.
Pero Alicia siguió bailando con Carlos y mirando a la mujer que tanto le llamaba la atención por su belleza.
Al término de la música que bailaban, Alicia se dirigió al bar y bebió un sorbo de su bebida. Se sentó y en cuanto encendía un nuevo cigarrillo la mujer, si esta, se acercó a su oído por detrás, y pronunció, vagarosamente, con una voz muy sexy - ¿puedo sentarme a tu lado? - Alicia sin poder decir que no le dijo si. La mujer le preguntó su nombre, y Alicia respondió turbada. Y antes de que Alicia pudiera preguntar como se llamaba aquella belleza, la mujer dijo - yo soy Susana. Y así empezaron una conversación, que hizo Alicia perder la noción del tiempo. Sus amigos volvieron de la pista de baile y preguntaron si Alicia no quería bailar y dijo que no. Presentó a Susana a sus amigos, y estés le dijeron a Alicia que se iban a otra discoteca, y le preguntaron si ella quería venir, y apresuradamente miró a Susana, la cuál le miró fijamente en los ojos, lo cuál hizo a Alicia tener escalofríos. Dijo a sus amigos que no quería ir, y que no se preocupasen por ella, que para volver a casa iba a coger un taxi.
Volvió la mirada a Susana, la cual le miraba con deseo de poseerla. En el rato que estuvieron hablando Alicia se quedó sorprendida por la maravilla de mujer, no solo físicamente, que acababa de conocer. Y entonces Susana se acercó a su oído, y le dijo - voy al baño, quieres venir - Alicia ya sabiendo de sus intenciones, le cogió la mano a Susana y fueron al baño.
Ya en el baño, Alicia se encostó en la pared al cerrar la puerta. Susana le miraba con deseo. Se acercó, le tocó el rostro, su boca con la punta de su dedo indicador, lo bajó por el cuello, por sus senos y se detuvo ahí. Empezó a besarla, suavemente, mordiéndole los labios, tan delicadamente que el cuerpo de Alicia estremecía de deseo, solo en pensar lo que Susana era capaz de hacer.
Susana empezó a besar su
cuello, fue bajando, sacó la blusa a Alicia y le besó los senos, y
los tocó como ningún hombre
lo había hecho hasta ahora.
Entonces Susana le tumbó en el suelo y empezó a lamer su ombligo, lo que le encantaba a Alicia. sacó su falda, sin prisas, sus bragas, besando la parte interior de los muslos de Alicia, lo que le excitaba mucho.
Empezó a besar su órgano, y Alicia ya estremecía de placer, pues Susana con simples toques le excitaba mucho. Susana levantó un poco la pierna de Alicia, para que se quedase doblada, hizo lo mismo con la otra.
Y empezó a lamer los labios superiores de Alicia, y esta cada vez se excitaba más y más, entonces Susana, después de tiempo lamiendo y besando los labios superiores e inferiores, cuando vio que Alicia estaba a punto de tener un orgasmo, empezó a chupar el clítoris, lo que hizo Alicia delirar, tuvo el primero orgasmo, del cuál vinieron muchos seguidos, Susana no paraba ante las suplicas de Alicia siguió, y Alicia tuvo su mejor orgasmo, una sensación inexplicable, y finalmente Susana se salió de entre medio de sus piernas y se tumbó al lado de Alicia, que estaba aún sintiendo la sensación del mejor orgasmo que había tenido. Susana le miraba con cara de satisfacción y Alicia en ese momento le dio las gracias, fue solo lo que consiguió decir en ese momento.
Pasado unos minutos Alicia ya recuperada se levantó, se vistió, Susana estaba encostada en la pared mirándola con deseo, y entonces Alicia, le sujetó la cabeza y le dio un beso largo.
salieron del baño y se dirigieron al bar nuevamente, como si nada hubiese ocurrido, solo había pasado 10 minutos desde que habían entrado en el baño.
En el bar, Susana encendió un cigarrillo, le dio una pitada y le ofreció a Alicia, ella lo cogió, tocando en sus dedos, que por más simples que parezcan le producían un deseo enorme.
Alicia cogió la mano de Susana y salieron a la pista a bailar, y bailaban de una manera que todos las miraban, pues también seguían tocándose sensualmente
Bailaron durante un rato y decidieron irse pero la historia continua….
Entonces Susana le tumbó en el suelo y empezó a lamer su ombligo, lo que le encantaba a Alicia. sacó su falda, sin prisas, sus bragas, besando la parte interior de los muslos de Alicia, lo que le excitaba mucho.
Empezó a besar su órgano, y Alicia ya estremecía de placer, pues Susana con simples toques le excitaba mucho. Susana levantó un poco la pierna de Alicia, para que se quedase doblada, hizo lo mismo con la otra.
Y empezó a lamer los labios superiores de Alicia, y esta cada vez se excitaba más y más, entonces Susana, después de tiempo lamiendo y besando los labios superiores e inferiores, cuando vio que Alicia estaba a punto de tener un orgasmo, empezó a chupar el clítoris, lo que hizo Alicia delirar, tuvo el primero orgasmo, del cuál vinieron muchos seguidos, Susana no paraba ante las suplicas de Alicia siguió, y Alicia tuvo su mejor orgasmo, una sensación inexplicable, y finalmente Susana se salió de entre medio de sus piernas y se tumbó al lado de Alicia, que estaba aún sintiendo la sensación del mejor orgasmo que había tenido. Susana le miraba con cara de satisfacción y Alicia en ese momento le dio las gracias, fue solo lo que consiguió decir en ese momento.
Pasado unos minutos Alicia ya recuperada se levantó, se vistió, Susana estaba encostada en la pared mirándola con deseo, y entonces Alicia, le sujetó la cabeza y le dio un beso largo.
salieron del baño y se dirigieron al bar nuevamente, como si nada hubiese ocurrido, solo había pasado 10 minutos desde que habían entrado en el baño.
En el bar, Susana encendió un cigarrillo, le dio una pitada y le ofreció a Alicia, ella lo cogió, tocando en sus dedos, que por más simples que parezcan le producían un deseo enorme.
Alicia cogió la mano de Susana y salieron a la pista a bailar, y bailaban de una manera que todos las miraban, pues también seguían tocándose sensualmente
Bailaron durante un rato y decidieron irse pero la historia continua….
